Se transformó la casa para mejorar el espacio de la ludoteca Rincón del Mar. La casa utilizada para la ludoteca contaba con dos espacios y un techo muy bajito de teja de zinc. El calor estaba difícilmente soportable y los dos espacios muy pocos prácticos. Se quitaron los muros internos de la casa para lograr un solo espacio, se guardaron los muros hasta 1.20 y el resto de la estructura se hizo en bambú y se elevó el techo. De esta manera, el aire circular de manera natural. El proyecto fue concebido por Ángela Jiménez, arquitecta quién apoyo la realización de la renovación con el apoyo del grupo Mariamulata. Este espacio amplio puede servir también para eventos culturales y reuniones de grupos de adultos.